Nuestra historia desde 1905

AVENTURA DE LAS HERMANAS AZULES EN AMÉRICA

 

1905 - 1971

        Esta “aventura” comienza en 1904 cuando parten al exilio seis Hermanas, rumbo al Mato Grosso (Brasil), abriendo así un nuevo capítulo en la historia de la Congregación.

         Obligatoria y providencialmente, hacen una escala de varios días en Buenos Aires, Argentina. Es en ese momento que se contactan con el párroco de Lomas de Zamora y rápidamente se concreta una fundación.

         El 23 de diciembre el Amazonas levantó anclas en Bordeaux hacia lo incierto y lo desconocido… finalmente las hermanas Léocadie (29 años), Francine (22 años) y Casimir (27 años), llegan a Buenos Aires el 14 de enero de 1905 y ellas mismas nos cuentan:

 

…"Al día siguiente, sábado 15, tomamos el tren para Lomas. Nos recibieron en la estación dos señoras de la comisión… esa misma tarde nos instalamos en la casa que habían alquilado en la calle Laprida 356… El español era conocido solamente por una de nosotras, y sobre todo para entenderlo, no para hablarlo,… sin embargo, había que abrir un colegio con 15 alumnas y enseñar castellano…"

   Así de simple y así de heroico fue el comienzo… Estas primeras hermanas francesas en Argentina echan sólidas raíces de la Familia Azul en el continente.

            El grupo azul crece, llegan nuevas hermanas y comienzan a surgir vocaciones argentinas. En 1907 se recibe la primera postulante argentina y dos años después, tienen la alegría de celebrar la primera toma de hábito.

            Se suceden las distintas fundaciones: Azul, Juárez, Ciudadela, Lomas… en la provincia de Buenos Aires, y en el interior del país: Santiago del Estero, Entre Ríos… etc. Son Hogares de ancianos/as, Hogares de Niñas, Hospitales, Colegios… el abanico es muy grande, el extenso territorio argentino es tierra de misión: "Irán allí donde las llame las voz del pobre" las había animado la Madre Fundadora.

            Son comienzos difíciles pero fecundos, más de 60 hermanas, valientes misioneras, llegan de Europa en seis años

 Para el capítulo general de 1936, año del centenario de la fundación, la provincia argentina presenta un pequeño informe: “Actualmente la provincia Argentina comprende 11 casas, el noviciado, la quinta, anexo del colegio de Lomas y las dos casas de Brasil (Poconé y San Luis de Cáceres). Las 11 casas son: 4 colegios (Lomas, Juárez, Azul, Ciudadela); 2 Hogares de Niñas (Lomas y Azul); 2 Hogares d Ancianos (Azul y Ciudadela); 2 Hospitales (Azul y Santiago del Estero); 1 Sanatorio en Buenos Aires. Además de su obra principal, las comunidades de esas casas, dan catecismo a numerosos niños pobres de los barrios…”

            Como lo hace notar el informe, a partir de la década de los 30, la Provincia Argentina sale de sus fronteras y se expande en los países limítrofes: primero en Brasil, luego en Paraguay, en 1955 es Uruguay quien las acoge y finalmente, con motivo de los 150 años de la Fundación de la Congregación, será Bolivia la elegida para establecer allí el carisma azul. Brasil perteneció a la Provincia Argentina hasta 1959, y Paraguay hasta 1968       

      Los aires nuevos traídos por el Concilio Vaticano II estremecen a la Provincia Argentina. El mismo Espíritu que trajo a las primeras azules a estas tierras, las irá llevando por caminos inéditos e inesperados.

 

1968 encuentra una Provincia Argentina fortalecida, son muchas las hermanas jóvenes y la presencia azul se fue extendiendo por numerosas provincias: Tucumán, Córdoba, Entre Ríos, Santiago del Estero…

Es un año clave para la vida de la provincia:

• en la Congregación es el año de la renovación, de la adaptación de las constituciones a las nuevas normas conciliares 

 Rápidamente la Provincia responde a estos llamados, somos invitadas a escuchar el clamor de los pobres y a dar respuesta a dichos desafíos. Fueron tiempos de opciones difíciles. Se abren nuevas presencias insertas en medios populares, ya sea en el interior del país: La Rioja, Rìo Negro, como en el conurbano bonaerense: Villa Independencia, San Jorge. Un nuevo estilo de vida comunitaria se va gestando como consecuencia de haber pasado de las grandes comunidades en Instituciones a las pequeñas comunidades insertas en los barrios.

  

1971 - 1974

La renovación llevada a cabo en la vida de la Provincia crea tensiones y el capítulo general de 1971 decide posibilitar la existencia de dos grupos: la Provincia Argentina y la Región, esta última dependiendo directamente del gobierno general…

 

1975 - 1983

Un decreto de la Sagrada Congregación para los Religiosos e Institutos Seculares, el 21 de mayo de 1975, decide que la provincia, que se llamará luego Provincia Córdoba, por tener su Sede en esa Ciudad, sea asumida directamente por la Sagrada Congregación y goce así de una especial autonomía. Mientras tanto la Región, convertida luego en provincia Lomas, continúa dependiendo del Gobierno General.

 Fueron años difíciles para las dos Provincias, tiempo durante el cual cada una siguió buscando ser fiel a lo que creyó ser el querer de Dios para ellas. Las prioridades asumidas por ambas las fueron llevando por distintos caminos.

 En 1980, un decreto de la Sagrada Congregación, enviado al Gobierno General y a la Provincia Córdoba, propone un período de transición durante el cual se debían poner los medios para que, en el Capítulo General de 1983, la Provincia Córdoba vuelva a depender del Gobierno General. Conscientes de que la unidad es un don y una tarea… se fueron dando pasos de acercamiento de ambas partes. Este Capítulo fue muy significativo para la historia de esa Provincia, la Congregación le aprueba un Directorio propio, y a partir de ese momento se reinicia la marcha común con toda la Congregación.

 

 1983 – 2006

A lo largo de estos años, ambas Provincias vivieron diversas experiencias, con sus búsquedas, con sus luces y sus sombras, sus logros y fracasos.

 

En 1986 la Provincia Córdoba vive muy profundamente los 150 años de la fundación de la Congregación, confirmando su opción por la inserción, el servicio a los más pobres y el compromiso con la historia, arraigadas en las raíces de nuestra Congregación y de nuestros pueblos, estas opciones se concretan en una nueva fundación en el altiplano boliviano, junto a los hermanos  “aymaras”.

         Mientras tanto la Provincia Lomas se sigue ocupando de manera especial de los Colegios que mantienen sus comunidades de hermanas. Se asume el colegio de Lanús y se crea un equipo itinerante de educación para animar a los 5 colegios. Se inicia el campamento azul con alumnos de todos los colegios, animado por hermanas y laicos. Se abre la comunidad inserta de Lastenia, en Tucumán. En San Martín de los Andes la Provincia asume un Hogar de niñas y adolescentes en situación de riesgo y se abre una nueva comunidad en Monte Caceros en Corrientes. Se trabaja intensamente en la pastoral juvenil y vocacional. Un equipo de hermanas, realiza durante varios años, una misión en el norte de Jujuy y también en Catamarca.

  Se envían tres hermanas a un curso en Cochabamba y a otra en Chile, a fin de prepararse para la formación.

En Federación, como continuación de la Escuela primaria, los padres asumen la apertura de un nuevo Secundario a su cargo.

En 1995, un laico, participa por primera vez del Capítulo General, y en nombre de la Provincia Lomas presenta el proyecto de economía solidaria.

        Después del Capítulo General de 1989 la Provincia Córdoba comienza a llamarse “Cruz del Sur”, al cambiar la Sede de Córdoba a Lomas.

 Es tiempo de “cerrar filas”… Es preciso seguir siendo creativas para continuar apostando a la vida con renovado entusiasmo y con nuevas presencias.

 

 2006….

Por motivos de reestructuración, la Congregación decide comenzar un proceso de integración de las dos Provincias, el cual se concretará en el Capítulo Provincial del 2006, dando origen a una única Provincia: Argentina – Uruguay.

 

A partir de esa fecha se busca fortalecer algunas áreas que posibiliten la gestión de la Provincia:

• La misión se organiza teniendo en cuenta nuevos sectores.
• Se profundiza un nuevo paradigma de misión, inspirado en el “encuentro salvífico” que nos presenta el evangelio escrito por la comunidad de Juan.
• Laicos y hermanas continúan ahondando en la espiritualidad azul a través de los Talleres de misión, inspirados en diversos íconos de la vida de Emilie.
• Una nueva convicción anima toda nuestra misión: la dimensión educativa y social, forman un todo inseparable.
• Se crea el Equipo de Coordinación de los, desde ahora, 12 Colegios, y se centraliza la administración de los mismos.
• Se unifica el economato de ambas provincias, creando un Equipo de Economía de Comunión, formado por hermanas y laicos asesores.
• El Convento, “casa de todas” se abre a la comunidad a través de Talleres para Adultos Mayores y recibe en su casa a personas que necesitan especial atención física, psíquica y espiritual.

 

         Estas son solamente algunas pincelas de historia, para profundizarla están a nuestra disposición los archivos de la Congregación, que nos permiten seguir paso a paso, más allá de los imponderables, el camino azul en estas tierras rioplatenses.